"des de que ens han robat les paraules no podem dir més que mentides."

divendres, 27 de setembre del 2013

bivivir

apagaba el humo de un cigarrillo después de que en la pantalla arrugada y sucia del proyector alguien señalara el final de la película; garabateaba en los obstáculos del día algún sentido por el que seguir existiendo; se paraba en cada gato, en cada plaza, en cada esquina; sus palabras se atropellaban mucho antes de aprender bien qué decir, si era oportuno o el momento; acariciaba espaldas y jardines enjaulados con la intención de liberarlos de su estigma; odiaba por igual el nombre siervo que el de amo pues en ellos la palabra mediocridad transpiraba a gritos; buscaba en el paladar los restos de los besos en los que se había enmarañado aquella noche y en los ojos un espejo con el que recordar esa mirada; nunca tuvo más miedo que la vez que no tuvo ganas de nada; tiene huecos y ombligos que piden auxilio sin demoras; y precipicios y rocas en los que encaramarse para poder ver un poco más lejos;  
y digo yo
ya que vamos a morir
mejor morir viviendo.