"des de que ens han robat les paraules no podem dir més que mentides."

dimarts, 27 d’octubre del 2015

ovillos

quisiera ser un poco más joven. lo justo para no estar tan seguro de que no tengo idea de casi, casi nada. esta indefensión.
quisiera ser un poco más joven para podernos engañar sin que tenga que ser de nuevo. porque después de una vez no es verdad que vuelva otra.
quisiera ser más joven para poder dejar de saber qué vendrá después y después y al cabo de un rato.
quisiera ser ese niño de nuevo. esa edad en la que se dicen cosas grandes y verdaderas sin el miedo a que se esfumen de golpe con solo escucharlas, sin el miedo de tener que saber que van a resquebrajarse contra el viento. sin el miedo de saber que tal vez no sean vedad. y decir te amo y que no suene banal ni hueco, no tanto. decir Amor sin hache y en majúscula. decir amor.

quisiera serlo
pero no lo soy
por eso digo y al momento empequeñezco. eso sí, pequeño, pequeño, sí que soy. me doblo hacia adentro, como un ovillo, como una caracola a la que le asusta el mar. 

y le pregunto al día...pero es la noche siempre la que me responde.

Berlin y el verde amarillo marrón.

un sonido de piano y un gato que ya hace días que se atreve a rondar mis pies. a acaricarlos. a decirme estoy aquí y ya eres un poco mío. tiempo tranquilamente pausado. un otro mi lugar y gente a la que puedes esperar. mañana y hoy y mañana. 

lloro un poco suavemente con la ceteza de que es lindo este pequeño dolor que no llega a ser punzante. lloro sin lágrimas ni llanto. lloro. es lindo, sí, es lindo y a la vez...

...esa terrible pena que a penas...viajar, viajar, viajar con la certeza de que iras acumulando cada vez en tu maleta
más personas a las que echar dolorosamente de menos.
lugares que nacen para dejar dentro de si la ausencia de la falta. y nada más...aún así es bello y doloroso y bello. sí, supongo que sí que lo és. 

dimarts, 13 d’octubre del 2015

dificultades para discernir

sólo la ignorancia se atreve a ser verdaderamente sobervia 
solo la juventud puede ser tan facilmente irreverente
y yo entonces me aparto de nuevo y en un lugar, bien lejos, 
me quedo tiritando para adentro sin saber hallar ninguna determinación. 
maldiciendo de nuevo mis dudas, agradeciendo hasta ahora mis poquísimas certezas.