"des de que ens han robat les paraules no podem dir més que mentides."

dissabte, 18 de juny del 2011

con previo aviso.

Vigilad: que odiemos el Poder no quiere decir
que amemos la impotencia. Estáis avisadas.

hay que volver claman en silencio los que nunca quisieron algo de verdad. hay que volver a casa, la batalla está perdida, muerden entre dientes los que nunca quisieron algo con demasiada fuerza. hay que volver y vuelven satisfechos de haber participado en una nueva aventura que contar a nietos y ancianos. yo también estuve allí-me lancé en paracaídas-corrí delante de los grises. fotografié el momento.

Eramos muchos pero aún estábamos solos. los de siempre. los de nunca. a los que no nos alcanza ni para cerrar los ojos esperando encontrar algo nuevo. así, a los que no nos vence sabernos vencidos. a los hijos de los hijos, a las hijas.
Una enfermedad se cierne y nunca a sido nueva. las mismas voces. las mismas uñas planean gritándonos que no gritemos por miedo a ahuyentar a aquellos que sólo quieren oír mentiras autocomplacientes. el fantasma de la aglutinación; que cuantos más seamos, que cuantas más marchemos, que hay que dar la voz a todos...hasta a los que nos silencian sistemáticamente la palabra.

Somos los sin voz, por eso gritamos sin esperanza ya de que se nos escuche.
Decimos verdades, por que ya hemos perdido el miedo de tener que convencer. Balbuceamos a medias buscando tan solo cómplices y amigos y amigas, dispuestas a encontrarnos y aprender nuestro imperfecto dialecto de sapos y culebras.
Aún tenemos miedo, y no nos acongoja decirlo por que sabemos que obviarlo solo hace que debilitarnos y engañarnos.
Somos los de siempre, los que nunca hablaron en mayúsculas; los que siempre en letra bien pequeñita se adentraron en las fisuras que descubrían en el sistema.
Somos las locas, los niños, las enfermas, las dudosas y contradictorias, somos las que tenemos miedo y rabia, rabia y miedo por todas vuestras necesidades de mantener el control y la calma.
Somos explosivas y cancerosas, somos vuestras pesadillas y nuestros sueños, tenemos hambre de vida aunque aun no sepamos bien bien qué debe ser eso. Nos arrebatasteis la posibilidad y ahora sólo sabemos ansiar imposibles.
No os vamos a dejar tranquilos. No os vamos a dejar tranquilas.

Somos nadie, somos ninguna, somos cualquiera.
Somos uno y muchas y todas al mismo tiempo.

...y no estamos organizadas ni lo queremos.

dilluns, 6 de juny del 2011

revolució

la meva revolució serà aquella que no em necessiti.