somos tan pobres que no tenemos ni tan si quiera
una
sola
palabra.
y nos limitamos a repetir insultos que no son nuestros, masticados, roídos revestidos con un manto de todos los colores, embalsamados, momificados, oscuros e iluminados,
pero nunca nuestros
y por falta de palabras salen de nuestros labios mil y una veces
y por falta de horizontes
y por falta de imposibles
y por falta de utopías
nos resistimos abyectos y desalmados a la palabra democracia como un posible que desconozcamos.
y vuelve a ser mentira.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada